• Se acabaron los tiempos de la corrupción, en que la impartición de justicia servía a los dueños del dinero.
• El candidato 34 de la boleta morada, a ministro de la SCJN, encabezó un acto cultural en su natal Tlacotepec, Oaxaca.
“Voy a llegar a la Suprema Corte con un nuevo bagaje conceptual y una nueva visión, no pienso llegar a la corte, encerrarme en cuatro paredes y olvidarme del pueblo”.
Hugo Aguilar Ortiz
Candidato 34 a ministro de la SCJN
Texto y Fotos: José Luis Sarmiento Gutiérrez
San Agustín Tlacotepec, Tlaxiaco, Oaxaca.- Con un amplio respaldo social y al frente de las preferencias electorales, el candidato número 34 de la boleta morada a ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Hugo Aguilar Ortiz, se perfilaba con mucha fortaleza para ocupar su escaño en el máximo Tribunal de México, al cerrar el periodo de campaña.
Y es que la democracia resultaba irreversible al seno del poder judicial en todo el país –gracias a este inédita elección de ministras y ministros, magistradas y magistrados, juezas y jueces–, ante el hartazgo y el repudio de un pueblo cansado de tener una Corte manchada por los estragos de la corrupción y al servicio de los dueños del dinero, como lo advertía categórico Hugo Aguilar.
Durante un acto cultural en su natal San Agustín Tlacotepec, Oaxaca, este miércoles 28 de mayo –rodeado del cariño, la admiración y el respaldo de comunidades de diversas regiones del país–, el candidato a ministro advertía sobre la importancia de la elección de este domingo primero de junio, “necesitamos una Suprema Corte que mire a los abajo, a los que no han existido”.
En un ambiente festivo, donde las niñas, niños, adolecentes, mujeres y hombres presentaban danzas autóctonas de la Mixteca Oaxaqueña y la soprano Abril Alexandra Ortiz, entonaba la Canción Mixteca –un verdadero himno en la región–, acompañada por la Orquesta Filarmónica Infantil de Tlacotepec, cientos de personas cerraban filas con Hugo Aguilar, con el firme propósito de que haya una transformación de fondo en el poder judicial podrido y corrupto.
“Voy a llegar a la Suprema Corte con un nuevo bagaje conceptual y una nueva visión, no pienso llegar a la corte, encerrarme en cuatro paredes y olvidarme del pueblo; estoy proponiendo una justicia real, que atienda las circunstancias particulares de cada persona y sobretodo de cada comunidad, porque es difícil que una persona imparta justicia si nunca ha estado en una asamblea, si no conoce sus reglas, de ahí mi propuesta de promover una justicia pluricultural”, afirmaba.
Bajo el acoso de personal del Instituto Nacional Electoral (INE), el candidato 34 de la boleta morada se comprometía a ser un fiel, combativo y honesto ministro de la Suprema Corte, para terminar con la falta de sensibilidad y la discriminación que han sufrido los pueblos indígenas y afromexicano, así como los sectores más desfavorecidos y desprotegidos en México.
“Al no ser reconocidos en la ley, los indígenas sufrimos discriminación, exclusión y racismo, pero gracias al artículo segundo de la Constitución que se acaba de reformar, como un acto de justicia, las autoridades indígenas de todos los niveles ahora tienen la histórica oportunidad de recibir un trato como sujetos de derecho público”, exponía Aguilar Ortiz al dar un emotivo discurso, para cerrar el ciclo de campaña proselitista y consolidar su presencia para ganar como ministro de la corte en la elección del domingo.
Las normas electorales, como todas las normas, tienen que tener pertinencia cultural, como en nuestros pueblos y comunidades que participan de corazón, no a cambio de ningún ofrecimiento ni dádivas, sino que están luchando porque quieren un cambio real y verdadero, destacaba el abanderado, ante autoridades indígenas de diversas partes de la república.
“Nosotros somos gente de lucha, de territorio, de cambio, que criticamos lo que está ocurriendo en el poder judicial y eso es lo que vamos a cambiar en las siguientes elecciones”, ofertaba Hugo Aguilar, al comprometerse a ser un ministro cercano al pueblo, que trabaje desde las comunidades y lejos de la comodidad de las oficinas, con privilegios económicos y al servicio de los poderes fácticos, como ha sucedido desde el periodo neoliberal.
Tras llevar a cabo una campaña honesta, austera y respetuosa de las reglas del INE, Hugo Aguilar encabezaba las principales encuestas y sondeos de opinión, frente a campañas de otras personas que mostraban el derroche de dinero, en su desesperación y búsqueda por comprar conciencias, lo que ya no se puede con un pueblo informado y participativo.
“Es un gran acierto que se ponga en manos del pueblo la elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, estamos en un país democrático, nuestra sociedad se construye sobre la base de la democracia y la Constitución tiene un planteamiento hermoso, de que la soberanía reside esencial y originariamente en el pueblo, y todo poder, toda autoridad, surge del pueblo y se instituye para su beneficio, pues no hay ningún fundamento para que la autoridad le haga daño a su pueblo”.
Entre porras y aplausos el candidato 34 de la boleta morada encendía los ánimos en la plaza principal de San Agustín Tlacotepec y destacaba la importancia de que la ciudadanía elija a las y los integrantes del poder judicial.
Lamentaba expresiones de las y los opositores, las personas simpatizantes de la derecha fascista, de que el pueblo no sabe elegir a las y los ministros, jueces y magistrados, porque desde hace años, en las elecciones de los poderes ejecutivo y legislativo, sólo debían votar las personas que tenían dinero y que los pobres no tenían derecho al voto igual que las mujeres, con el argumento de que no tenían un nivel de raciocinio, lo que es completamente falso.
“Hoy siguen con sus mismos prejuicios, de que el pueblo no sabe elegir, pero este primero de junio les vamos a demostrar que el pueblo sabe muy bien elegir y que vamos a llegar al poder judicial personas con honestidad, preparación y mucha sensibilidad, que vamos a ponderar una nueva visión del derecho y de la justicia”, señalaba Hugo Aguilar Ortiz.
Y comentaba que se va a conformar un poder judicial emanado del pueblo; las mujeres y hombres que ocupemos los distintos cargos que se van a votar el domingo primero de junio, con nuestros estudios y conocimientos, sobretodo, con nuestro contacto con la realidad del pueblo, vamos a imprimir una nueva visión de la justicia en México, aseguraba el especialista con 15 años de experiencia en derecho penal y después de haber librado una lucha de décadas por la defensa de los derechos indígenas.
Vamos a cambiar a las y los ministros, magistrados y jueces que se ha encerrado en el formalismo, por otras y otros que sean sensibles con las causas del pueblo, para generar un verdadero cambio, como lo demandan la mayoría de ciudadanas y ciudadanos en México, con un que demandan nuevo conjunto de derechos, añadía el candidato 34 de la boleta morada.
Hugo Aguilar cerraba este ciclo de campaña después de haber recorrido todo el país y recibir el respaldo de miles de personas que lo vinieron impulsando para que se convierta en el primer ministro indígena de la SCJN, desde el oaxaqueño zapoteca de San Pablo Guelatao, Benito Juárez García.
