Francisco Alejandro Leyva Aguilar
Mientras el fin de semana el gobierno del anodino Salomón Jara difundía un video conmemorando el segundo año del pírrico triunfo del calzontzin, ayer trascendió el descubrimiento de una fosa clandestina donde probablemente fueron enterrados los cuerpos de la activista Mixe Sandra Domínguez y de su esposo.
Muy lejos de tener algo que festejar en dos años de desastroso gobierno, Salomón Jara debería poner orden en secretarías sensibles que no están dando resultados como la de Gobierno y la de Salud porque ahí tiene sendos estercoleros que tienen a Oaxaca en la ingobernabilidad y en la indefensión sanitaria.
Los asesinatos en Juchitán de Zaragoza el fin de semana y en la capital del estado, que se suman a una larga lista que rebasa ya los mil homicidios y una cantidad escandalosa de feminicidios, no han motivado al anodino gobernador a ajustar su gobierno en dos años de desaseo administrativo, de impunidad, de escandalosa corrupción y prominente nepotismo dentro de las estructuras del gobierno.
Y es que el propio Salomón Jara Cruz permite el nepotismo asqueroso en dependencias como el Colegio de Bachilleres o la Secretaría de Gobierno, porque así le conviene a sus propios intereses, solo hay que ver la conformación de la nueva dirigencia de Morena en el estado.
El nuevo presidente Emmanuel Navarro Jara, es sobrino del Calzontzin y el secretario de organización Shabín Jara Bolaños, es hijo del anodino, por lo que las estructuras y la afiliación de militantes de ese partido, será prerrogativa de los Jara.
Claro que eso no ha caído bien a los morenistas de Oaxaca porque saben perfectamente que quien otorgue las próximas candidaturas, será la manada de los Jara con el respectivo diezmo, porque para eso se pintan solos.
Tampoco en la presidencia de la república cayó bien la selección de la nueva dirigencia de Morena en el estado porque es bien sabido que a la presidente (con E) Claudia Sheinbaum no la tiene muy contenta el zapoteco.
Los escándalos de corrupción, la desaparición de activistas como Sandra Domínguez, los ajustes de cuentas entre sindicatos de transportistas, los asesinatos a plena luz del día y en el centro histórico de la ciudad de Oaxaca, los feminicidios de activistas triquis, la violencia generalizada, ya le está pasando factura a la inquilina de Palacio Nacional que ha recibido al menos una recomendación de la Alta Comisión para los Derechos Humanos de la ONU.
Le faltan 4 años al anodino gobernador de Oaxaca y ya está pensando en su sucesión, porque es un hecho que no le va a ir tan bien como a Cuitlahuac García que acaba de dejarle el puesto en Veracruz a Rocío Nalhe.
El pésimo gobernador morenista de Veracruz, va a ser incorporado al gabinete de Sheinbaum por instrucciones del peje, pero esa suerte no la va a correr Salomón Jara dentro de cuatro años y, claro, tiene que esconder su kilométrica cola con un sustituto a modo.
Por eso su elección anticipada y por eso su necesidad de cooptar la dirigencia estatal de Morena para preparar el camino a quien deba sucederlo. A menos claro, que se le atraviese la revocación de mandato el próximo año y los votantes para su salida, sean más que los poquitos que votaron para su entrada.
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