Francisco Alejandro Leyva Aguilar
Mal y de malas la corcholata del peje Claudia Sheinbaum. Después del estridente regaño del “presidente” porque no lo defendió de las preguntas que los ciudadanos hicieron en donde definen este gobierno como fallido, los mexicanos nos amanecimos hoy con que sí tiene familiares con dinero en paraísos fiscales.
La corcholata abollada, reconoció en W-Radio que “su familia sí tiene al menos una cuenta en paraísos fiscales” tal y como lo denunció la candidata Xóchitl Gálvez Ruiz en el debate presidencial del pasado domingo lo que quiere decir que la corcholata pejista sí es mentirosa y mucho.
No es lo mismo confesarlo en W-Radio que en cadena nacional, donde fue cuestionada por Xóchitl Gálvez y ante millones de mexicanos. Ahí la mala copia del peje negó rotundamente los cuestionamientos de la hidalguense mintiéndole a millones de mexicanos aún a sabiendas que su familia sí tiene menciones en el escándalo de los “Panamá Papers”.
Claudia Sheinbaum durante el debate dijo: ¿”cómo creerle a una mentirosa”?, y sostuvo que lo dicho por su adversaria, era “completamente falso”, sin embargo dos días después estaba reconociendo que lo dicho por Xóchitl es verdad.
“SI, a ver, les explico fue una cuenta que tuvo ahí mi abuelita hace muchísimos años que alguien la convenció de sacar su dinero y era muy poco dinero realmente. Y entonces cuando muere mi abuelita pues, por herencia le toca principalmente a mi tía”, dijo Claudia Sheinbaum a W-Radio.
Claro que la mamá de Claudia Sheinbaum, también aparece como beneficiara de cuentas en los Panamá Papers, la señora Annie Pardo Cemo mamá de la corcholata, está en la relación de artistas, deportistas y políticos de dicha filtración de la firma de abogados Mossak Fonseca en 2018 que es una empresa que se encarga de establecer compañías en paraísos fiscales.
“Era poquito dinero”, dice Claudia Sheinbaum y cabe preguntarse: para la corcholata presidencial ¿cuánto es “poquito” dinero como para tratar de ocultarlo en paraísos fiscales?, porque el solo hecho de que Mossak Fonseca haya sido su broker, nos dice que la secresía de esas cuentas, para la abuela o la madre de la corcholata, era un tema toral.
Y si vas a esconder algunos cuantos millones de pesos, pues las abuelitas ocupan más bien su colchón, antes que mandar su dinero a lugares que ni siquiera conocen, pero si el dinero supera los 9 ceros y si no son pesos mexicanos sino dólares, pues vale la pena esconderlos.
Dicen que una mentira puede avanzar 100 años pero la verdad la alcanza en un día. El estigma de “mentirosa”, ya se lo colocó en el pecho y en la espalda la corcholata presidencial y después de mentir en cadena nacional como lo hace todos los días su jefe, pues no habrá manera de que se lo quite. Probablemente será la última vez que la veamos en un debate.
Pero, de acuerdo a la filtración de los Panamá Pepers, no solo es la mamá de Claudia que apareció en la empresa “offshore” JAEM LTD asentada en las Islas Vírgenes Británicas, también están vinculadas Mati Cemo de Pardo, Esther Pardo Cemo y Sally Pardo Cemo, como accionistas de Merrill Lynch.
Es claro entonces que no se trata de unos cuántos miles de pesos, sino de millones de dólares y la pregunta es, si la familia de la corcholata son, en su mayoría académicos ¿de dónde sacaron tanto dinero para tener que ocultarlo en paraísos fiscales?, pareciera y solo pareciera que los familiares de la corcholata no son más que prestanombres de un fraude tremendo orquestado por la jefa delegacional primero y la jefa del gobierno de la Ciudad de México después, solo hay que ver de cuándo son esos depósitos en esas empresas.
De entrada es una mentirosa como su efe y eso ya quedó en evidencia.
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