Francisco Alejandro Leyva Aguilar
En paz descanse Carlos Urzúa, el primer Secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de López y últimamente uno de sus críticos más puntuales. Apenas el domingo estuvo en la #MarchaPorLaDemocracia y ayer lo encontraron muerto en su casa víctima, se supone, de un accidente. ¿Se murió?, o ¿lo mataron?
Interesante lo planteado por la Fiscalía General de la República (FGR) después de conocer el reportaje que hizo Latinus en una entrevista a Celso Ortega, líder de los “ardillos” y donde asegura que no solo el cartel de Sinaloa, sino también los zetas, financiaron con dinero y con logística política, la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador.
La FGR del insufrible Alejandro Gertz Manero quiere que Celso Ortega “presente pruebas” del financiamiento de los zetas a la campaña presidencial del hoy “presidente”, una petición que no tiene parangón, no solo por inédita sino por absurda. ¿usted cree querido lector que el líder criminal va a presentarse ante la FGR a presentar pruebas del financiamiento de los zetas a la campaña presidencial de 2006?, me parece que es infantil creer que sí.
Pero la pregunta es ¿por qué la FGR no le ha pedido a Tim Golden, a Pro-publica o a la DEA que demuestren lo dicho en el reportaje que apareció hace unas semanas en el portal estadounidense donde los creadores aseguran, al través de entrevistas con 5 testigos protegidos que el cartel de Sinaloa financió la campaña presidencial de López con 2 millones de dólares?
Me parece que los reportajes que hemos visto han generado un escándalo de dimensiones mayúsculas y justo en tiempos electorales, lo que le da a López la posibilidad de deslindarse diciendo que se trata de una estrategia de los conservadores neoliberales para descarrilar a la candidata de Morena Claudia Sheinbaum.
Pero queda la susceptibilidad. Sin importar el timing electoral, Andrés está obligado a limpiar la investidura presidencial denunciando ante las autoridades judiciales en Estados Unidos, a los tres actores principales que lo relacionaron con el cártel de Sinaloa, porque, distinto a la declaración de Celso Ortega que pudiera tener una connotación política, el reportaje de Pro-Pública involucra a dependencias del gobierno de los Estados Unidos.
La FGR puede quedarse esperando las pruebas de Celso Ortega y los “ardillos”, es más podría preguntarle a Félix Salgado Macedonio de la autenticidad de los dichos del criminal, pero en el caso de Pro-Pública y Tim Golden, el asunto toma tintes, dijera López, de intervencionismo porque el reportaje, a pesar de que es una investigación vieja, lo publican en el marco de la elección presidencial.
Y en juego para López, está la continuidad de su cuarta transformación que, sin resultados tangibles y con la percepción de que tenemos un “narco presidente”, puede perderla ante Xóchitl Gálvez el 2 de junio de 2024. Por eso es importante que la FGR o la Cancillería Mexicana, denuncien a la Agencia contra las Drogas DEA o por lo menos que le exijan una disculpa pública.
No es para menos porque en la marcha del domingo, los gritos que más sonaron después del Himno Nacional fueron “fuera López” y “narco presidente”, lo que quiere decir que, si desde Estados Unidos hay la intención de crear la percepción de que López quiere robarse la elección de junio y que obedece a intereses del narcotráfico, lo están logrando, así que tiene que denunciar porque EL QUE CALLA, OTORGA.
@leyvaguilar
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