Por: Fernando Cruz López.
Escuchar las cuentas alegres que presentaron hoy en la conferencia mañanera las máximas autoridades del país en relación con lo que pasa en nuestra entidad, nos sorprende muchísimo, pues pintan un Oaxaca seguro al cien por ciento, donde no hay delitos, donde la incidencia delictiva según ellos, va a la baja y en donde se vive en paz y en calma; sin embargo, los hechos demuestran lo contrario, cada día hay más inseguridad y violencia en todo Oaxaca y se recrudece en la zona de la cuenca del Papaloapan, en el istmo de Tehuantepec y en la costa Oaxaqueña.
Hoy por la mañana escuchamos con atención el reporte que rendían ante el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, las autoridades federales que coincidía con los reportes militares, pero nadie le dijo al presidente que en Oaxaca hay varios fenómenos que están causando muchos problemas, uno de ellos es el relacionado con la proliferación de migrantes, que están por todos lados y muchos ya se están estableciendo en diferentes zonas del estado.
Nadie le dijo al presidente López Obrador que en Oaxaca los migrantes son maltratados desde que llegan a territorio oaxaqueño, pues si no son los agentes de migración, son los policías municipales de los pueblos por donde pasan o simplemente son víctimas de las policías estatales e incluso de la guardia nacional.
Tampoco nadie le dijo al presidente que hay un fuerte incremento del mercado negro de armas en toda la entidad y principalmente el flujo de armas ha aumentado en zonas que tienen problemas de límites de tierras, lo que es muy peligroso.
De igual manera, nadie le comento al presidente de México que muchas de las armas que se están vendiendo en territorio oaxaqueño entran por el istmo de Tehuantepec, y qué personal de las policías estatales y municipales conocen esta situación, pero no hacen nada al respecto, pues todo parece indicar que tienen componendas con los traficantes de armas.
En lugar de decirle al presidente de México lo que en realidad está pasando en Oaxaca, lo engañan diciéndole que todo está en paz y que los oaxaqueños están felices por la extrema seguridad en la que vivimos.
Sin embargo, los hechos hablan por sí solos, el trasiego de droga no disminuye, por ejemplo, en los pueblos de la costa oaxaqueña todos saben que enormes cargamentos de droga siguen llegando o en su caso pasando por esos lugares y nadie dice nada, en los pueblos de la región de Miahuatlán y Ejutla de crespo todos saben quiénes se dedican a la venta de armas de fuego de todo tipo.
Nadie le dijo al presidente López Obrador, que muchas de esas armas se han empleado en los enfrentamientos que ha habido entre comunidades oaxaqueñas por cuestiones de límites de tierra, ahí está el reciente caso de San Miguel el Grande, Tlaxiaco donde hubo cinco muertos, una tragedia que pudo evitarse, pues ya le habían advertido a funcionarios de la secretaria de Gobierno que la situación estaba muy tensa, pero nada hicieron por intervenir y evitar los hechos de sangre…Sígame en X como …@visionpolitica7.