Francisco Alejandro Leyva Aguilar

Las cosas no más no le salen al peje López, luego de que un juez le prohibiera hablar de Xóchitl Gálvez, ahora el Ministro Javier Laynez de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), prepara un documento para el análisis de sus compañeros en la Segunda Sala de la Corte en el que propone “descongelar” al Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI), para que puedan sesionar, aun con los cuatro comisionados que actualmente están en activo, otorgando un voto de calidad a la Comisionada Presidente Blanca Lilia Ibarra.

Si hay algo claro entre tanta opacidad gubernamental, es que al peje le interesa mucho reservar información de su gobierno que no es clara o que, en el entendido de que los recursos usados son públicos y por tanto deben transparentarse, oculta por años esa información porque sabe de ante mano, que los procedimientos están amañados, sucios o ilícitos.

Es escandalosa la reserva de información que el gobierno de López ha guardado y lo peor, es que esa información pertenece a asuntos de toral importancia para el país y los ha reservado en rangos de tiempo que van desde los tres, hasta los diez años. En esencia el peje ha ocultado información sobre la captura de Ovidio Guzmán y su inmediata liberación, ordenada según sus propias palabras por él mismo y lo cuál constituye un delito consagrado en el artículo 150 del Código Penal Federal, libro segundo, título cuarto que a la letra dice:

“Se aplicarán de seis meses a nueve años de prisión al que favoreciere la evasión de algún detenido, procesado o condenado. Si el detenido o procesado estuviese inculpado por delitos contra la salud, la persona que favoreciere su evasión, se le impondrán de siete a quince años de prisión…”, “Si quien propicie la evasión, fuese servidor público, se le incrementara la pena en una tercera parte de las penas señaladas en este artículo, según corresponda. Además SERÁ DESTITUIDO DE SU EMPLEO Y SE INHABILITARÁ PARA OBTENER OTRO DURANTE UN PERIODO DE OCHO A DOCE AÑOS”.

¿Ya hay denuncias en contra del peje por haber soltado a Ovidio Guzmán?, de acuerdo a las fuentes consultadas hay al menos media docena de denuncias que, claro no han prosperado porque el Fiscal Alejandro Gertz Manero es un palero del sistema y de autónomo no tiene absolutamente nada.

Pero no solo es la información respecto del narcotraficante sinaloense, también hay información reservada sobre el Plan Maestro de construcción del Aeropuerto Felipe Ángeles cuya construcción y operación, está plagada de irregularidades, desde las adjudicaciones directas, hasta el pago de sobre precios por ejecución de obra y, ahora el subsidio que debe inyectarle recursos extraordinarios para su operación que pagaremos usted y yo de nuestros impuestos.

Otro asunto espinoso, es el avalúo y el contrato de compra venta del avión presidencial que fue “vendido” a un costo muy inferior de sus avalúos pero que además el gasto por mantenimiento mientras no ese usó, también quedó en la penumbra de la opacidad obradorista, al igual que el show de la rifa que no fue rifa.

Para proteger a su corcholata consentida Claudia Sheinbaum Pardo, el expediente del Colegio Rébsamen que colapsó en el terremoto de septiembre de 2017 y mató a decenas de infantes, también fue clasificado al igual que el expedienté de la línea 12 del metro que, lo mismo, se vino abajo por deficiencias en su construcción y en donde están inmiscuidos desde el ex canciller Marcelo Ebrard, el líder nacional de Morena Mario Delgado y hasta la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum.

Se ha reservado la información, sin embargo nos quedan los amparos ante la SCJN que, ya vimos, tiene la ley en la mano y no obedece a caprichos, consejos o sugerencias del peje, por tanto esa información puede ser desclasificada y los mexicanos tendríamos la oportunidad de conocerla y tomar decisiones al respecto, por eso es tan importante que la Corte haya tomado la decisión de que el INAI pueda seguir sesionando.

El peje está acorralado y, como escribí ayer, es importante que estemos atentos contra lo que pueda hacer una mente obnubilada por el poder y desesperada por perderlo en 2024. Las cosas ya no le salen tan bien López y es clara la desaprobación de la sociedad que ha ido creciendo en los últimos meses.

La popularidad del peje ha ido disminuyendo proporcionalmente al incremento de su ira que lo hace tropezarse con sus propias palabras y lo invita a desdeñar la ley, eso claro a los mexicanos no nos gusta y por eso el descenso en su aprobación, de ahí que debemos de tener cuidado porque las reacciones serán de un loco desequilibrado, ya vimos lo que pasó en Poza Rica Veracruz el fin de semana, decenas de cuerpos desmembrados que, como quiera que sea, infunden miedo pero que para el peje, representan “otros datos”.

Si en 2024 no lo detenemos, no vamos a tener otra oportunidad, así que no hay que bajar la guardia.

@leyvaguilar
Instagram leyvaguilar
Facebook: Francisco Alejandro Leyva Aguilar

Compartir