Francisco Alejandro Leyva Aguilar
La cacería que ha comenzado el gobierno de Salomón Jara en contra de exfuncionarios del sexenio anterior que encabezó el priista Alejandro Murat Hinojosa, no es más que una desesperada acción para tratar de legitimar su administración que obtuvo solo el treinta por ciento de los votos del padrón electoral.
Una de las votaciones más bajas en la historia de Oaxaca que lo coloca en un estatus de legal, pero que carece de legitimidad, por tanto la manera de buscarla es metiendo a la cárcel a funcionarios por supuestos fraudes relacionados con la administración anterior.
Así vemos que está preso Jorge Zárate Medina, ex director del Instituto Catastral del Estado de Oaxaca, al que Salomón presumió como un logro de su gobierno pero que en realidad su proceso comenzó en el sexenio de Alejandro Murat Hinojosa, sin que de por medio hubiese metido las manos el exgobernador por él.
De la misma manera Alejandro Aroche ex director del instituto Estudios de Bachillerato del Estado de Oaxaca (IEBO), fue detenido en un conocido restaurante de la ciudad de Oaxaca, presuntamente también por fraude.
Ayer por la tarde, fue detenido igualmente Manuel Meza Corres quien se desempeñó como subsecretario en la Secretaría de las Infraestructuras (SINFRA), por el presunto delito de uso ilícito de atribuciones y facultades.
Tengo información además que la Consejería Jurídica del Estado de Oaxaca que encabeza Geovanni Vásquez Sagrero y que es utilizada por el Gobernador de Oaxaca Salomón Jara, actúa como una unidad de persecución política a ex funcionarios del Gobierno de Alejandro Murat Hinojosa.
En los lunes de conferencia de prensa, Salomón Jara, en su esquizofrenia política, ha identificado a por lo menos tres cárteles: el “del despojo”, el “del agua” y ahora el “del saneamiento financiero” y apuna sus baterías a algunas secretarías para tratar de detener a exfuncionario de más alto nivel.
Sin embargo sí hay otros cárteles que lo traen en jaque, por ejemplo el de la Sección XXII que hoy va a desquiciar la ciudad por la conmemoración del 14 de junio día del desalojo fallido en el sexenio de Ulises Ruiz Ortiz en 2006, pero la base magisterial ya trae varios días con la ciudad completamente bloqueada.
Mientras tanto el Gobernador se la pasa de gira en gira, presumiendo fotos en las comunidades, tomándose un café o bailando en previas de la Guelaguetza sin ponerle atención a los problemas más esenciales de la ciudad.
Los números de Salomón en apenas seis meses de gobierno no son muy alentadores. No ha habido una sola noticia de, por ejemplo creación de empleos, desarrollo de proyectos de importancia, solución de problemas sindicales como en el asunto de Salud Púbica, ni mucho menos acuerdo con el magisterio.
Los conflictos agrarios desde que llegó Salomón Jara al Gobierno se han intensificado y las protestas, manifestadas en bloqueos carreteros sobre todo en el istmo de Tehuantepec, no han cesado de que llegó “la primavera oaxaqueña” que más bien es “la maldita primavera”.
Acaso los asuntos más sensibles que tiene que resolver el mandatario oaxaqueño, tienen que ver con los feminicidios, porque Oaxaca lleva meses colocándose en el primer lugar de feminicidios en el país.
Otro asunto que pesa en la agenda de Salomón Jara, son los asesinatos, Solamente el lunes pasado hubo cuatro muertos y ayer otros cuatro en la entidad que ha acumulado desde el primero de diciembre de 2022, 515 homicidios dolosos en lo que va de la administración de Salomón Jara.
Al seguir la misma tónica que el “presidente”, así en minúsculas y entre comillas Andrés López, Salomón busca crear su propia “mafia del poder”, para culpar a ellos de todos los males que no puede resolver, por eso dice que hay por lo menos tres cárteles que está, según él investigando.
NO se ha dado cuenta que, quien acusa que es Geovanny Vásquez Sagrero, su consejero jurídico, es el mismo que presuntamente -y como lo consignó una nota periodística- acuerda la impunidad para los ex funcionarios que supuestamente persigue.
Salomón debe poner más atención a lo que pasa en el estado porque pareciera que sigue con la borrachera del triunfo y en sus alucinaciones piensa que todo lo malo que sucede en nuestro estado, es culpa de “Polanco”, unas oficinas que por cierto, conoce y conoce muy bien.
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