Francisco Alejandro Leyva Aguilar

México es un país telenovelero justamente por lo que López dice. Que hay una masa importante de personas ignorantes a los que les gusta verse reflejada en un capítulo de la Rosa de Guadalupe o de esas novelas de Yolanda Vargas. Se ven identificadas en las tragicomedias producidas por la televisión privada… hasta exportamos telenovelas.

Por eso ya hicimos una de la salud el peje. Ayer mismo dijeron que ya había muerto de un paro cardiaco que no lo dejó llegar de Mérida a la Ciudad de México, pero que los militares y su equipo de morena, dirán que sigue vivo y estable como lo hicieron con Hugo Chávez en Venezuela que lo ocultaron 15 días hasta que Nicolás Maduro pudo afianzarse en la dictadura.

Otros dicen que sigue muy enfermo en el Hospital Militar en lo que habría sido un preinfarto que lo postrará por unos días, por eso ayer el que fue a la mañanera fue Adán Augusto a decir que el peje esta bien y que solo tiene COVID-19, lo que parece poco probable porque el peje desdeña la enfermedad y así como es de mentiroso, habría ido a la mañanera sin cubreboca.

Sin embargo, algo pasa con la salud del “presidente”, así en minúsculas y entre comillas y hay hechos que son incontrovertibles porque un problema de ese tamaño, no se puede ocultar. En primer lugar, sí se sintió mal en Yucatán, hay quienes afirman que se desmayó y no sería la primera vez.

Es verdad que fue trasladado en una aeronave militar desde el sureste de México a la Ciudad capital en donde ingresó -también es cierto- al Hospital Central Militar y ahí fue atendido por su doctor personal a quien le apodan sus compañeros “el güero” Tabera quien lo recibió en el nosocomio militar.

Hay una versión extra oficial cuya fuente no puedo revelar, que indica que el diagnóstico del peje es delicado puesto que tuvo un problema vascular que repercutió en uno de los nervios faciales, que le inmovilizó medio rostro del lado derecho eso obvio, le impide tener sensibilidad en la mitad de su cuerpo, por tanto no puede hablar correctamente y al que se le sumó un preinfarto.

Es decir, la salud del “presidente”, es delicada porque los rumores no comenzaron hoy, sino desde que andaba en campaña y no le deseo ningún mal, solo le podría sugerir que en vez del Hospital Militar, se atienda en una clínica del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (INSABI) y en vez de que lo revise el Doctor Tabera, lo hagan los médicos cubanos que contrató y que su diagnóstico nos lo de el epidemiólogo Hugo López Gatell, digo para ser congruentes con el discurso del Macuspano.

Pero ¿qué habría generado este nuevo preinfarto al peje?, claro que tiene varios motivos importantes para que su corazón deje de funcionar. Si es un hombre que tiene padecimientos cardiacos, debe cuidar su humor y una gira antes de la de Yucatán, lo vimos vociferar eminentemente molesto, contra los Estados Unidos y su intención de intervenir en México en contra de los cuates del peje, los de Badiraguato.

En la arenga de ese día, vimos a un peje iracundo, malhumorado, radical que incluso propuso hacer realidad el Himno Nacional y volver a cada mexicano un soldado para defender, no a la Patria, sino a los narcotraficantes; no a la Soberanía, sino al negocio de los carteles de la droga… se le fueron las cabras al monte.

Unos días antes, el peje anunció la tan ansiada venta del avión presidencial y dio detalles de esa venta, dijo a quién se lo vendió y por cuánto dinero, es decir hizo una telenovela de la venta del avión presidencial que ya había rifado.

El problema es que ese día de la gira a Yucatán, le avisaron que podría existir una demanda por la venta del José María Morelos y Pavón, puesto que hay adeudos que aún no se han liquidado, por ejemplo los restantes pagos a Banobras por un monto superior al proceso de compraventa a Tayikistán, una de las 5 ex repúblicas de Asia central y conocida por su narcogobierno.

También hay adeudos al Broker, y por concepto de mantenimiento que del Gobierno de López dejó de pagar, pero sobre todo el problema más grave es que México no puede recibir el dinero de Tayikistán porque ese país, en los estándares internacionales tiene serias sospechas de lavado de dinero.

Así que para ingresar el dinero va a tener que modificar las leyes de México lo que implicaría que cualquier interesado -y hay muchos- pueda lavar dinero de crimen organizado de manera abierta, por tanto no podrá recibir los 92 millones de dólares de los 218.7 millones que costó, es decir una depreciación de más del 70 por ciento, a todas luces una muy mala venta.

El anuncio de las demandas por la merca del avión José María Morelos y Pavón a un narcogobierno ruso, también tendrá implicaciones políticas internacionales y, pareciera que el peje no mide esas consecuencias, no tiene asesores que se lo indiquen o no escucha al Canciller Marcelo Ebrard. De entrada los gringos tiene una motivación extra para intervenir en México en contra de los cárteles de la droga.

Y para defender a los cárteles el peje no tendrá, aunque el cielo así lo haya mandatado, un soldado en cada hijo dado… al menos que no cuente conmigo porque el peje no es la Patria y a quien trata de defender, por más que hayan nacido en aquí, son a los enemigos de la nación.

Como dije ayer, no le deseo la muerte porque tiene que pagar en vida desde el asesinato de su hermano, hasta los millones de personas que han fallecido en México por sus malas decisiones, desde los niños con cáncer, los enfermos crónicos sin medicinas, los fallecidos por COVID-19, y los cientos de asesinatos en el baño de sangre más escandaloso y macabro que ha tenido México. El peje, tiene que pagar en vida.

@leyvaguilar
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