Francisco Alejandro Leyva Aguilar

No sean así ingleses y españoles, no se vale que le vean la cara a un pobre ignorante. Primero Deer Park y ahora Iberdola… no cabe duda que la historia de hace 502 años, se repite y vienen los güeros a verle la cara al indio.

Primero la internacional Shell le ofrece al viejo de Palacio Nacional, ya dañado por sus “achaques” al corazón que lo tienen prácticamente dopado con medicina, una refinería que está prácticamente en la quiebra, es decir fierros viejos que a la transnacional no le interesan más y ni siquiera se la vende en México, lo que ya de sí es una tontería, sino en Houston Texas.

El agrónomo Octavio Romero Oropeza, director de Petróleos Mexicanos, informó que la compra de Deer Park le constó al erario mexicano ¡MIL CIENTO NOVENTA Y DOS MILLONES DE DÓLARES!, al incluir los montos por inventarios y deuda que se pagarán a Shell .

El mismo Oropeza aseguró que Deer Park tiene una deuda de 980 millones de dólares , pero el peje aseguró que hay reservas en México cercanas a los 47 mil millones de pesos para cubrirlas, el problema es que la refinería, tiene comprometida la venta de gasolina refinada, no para México, sino para otras países.

Es obvio que alguien que trae 200 devaluados pesos en la cartera, no sabe de negocios y el solo hecho de que Shell se haya decidido a vender Deer Park, es porque las utilidades de la refinería ya no eran ni suficientes, ni viables, así que buscaron a un pendejo para vendérsela y lo encontraron ahí cerquita de la frontera Texana.

¿Se acuerdan lo que el peje decía de Iberdrola y de Felipe Calderón?. Bueno pues resulta que la empresa energética más famosa de España, le volvió a vender espejitos al peje. Si se siente émulo de Benito Juárez, más bien parecería mala parodia de Moctezuma Ilhuicamina que recibió con honores a Hernán Cortés hace 502 años.

Iberdrola no solo le vendió espejitos al peje, además le mandó un mensaje muy fuerte a la inversión extranjera directa (IED), para que saque sus capitales de México y no vuelvan a invertir aquí en tanto no se vaya la cuatroté y haya condiciones para dicha inversión.

López nos dijo en uno de sus soliloquios mañaneros, que habría “expropiado” activos fijos de Iberdrola, pero en realidad la trasnacional se los vendió y a un precio de oro. La española le mercó al peje 13 de las 27 plantas de energía eléctrica que opera en nuestro país por un monto de ¡SEIS MIL MILLONES DE DÓLARES!, y con eso le manda una señal a otras empresas como Enel, Naturgy, Mitsui, Sempra Infraestructura, New World Entec entre otras para que evalúen la posibilidad de pausar o incluso retirar sus inversiones de México, en lo que resta de esta desastrosa administración.

Las 13 plantas que compró el peje en sobreprecio, son las más viejas y obsoletas que Iberdrola operaba en varios estados de nuestro país, incluso aquí en en Oaxaca donde hay varios campos de aprovechamiento de energía eólica en el Istmo de Tehuantepec, una zona potencialmente alta para la producción de energía eléctrica al través del viento.

Son más viejas y obsoletas que la solitaria neurona que tiene el peje dentro de su cabeza.

Y es que la política energética de López, no es precisamente la de incentivar la IED, sino al contrario, reducirla y hasta desaparecerla. En 2017 en este sector hubo 5 mil 893 millones de dólares de inversión; para 2019 había bajado a 4 mil 254 millones de dólares y en 2021 la cifra de la IED apenas alcanzó los 705.9 millones de dólares, es decir la caída de la Inversión Extranjera Directa en el rubro energético fue estrepitosa desde que el peje es “presidente”, así en minúsculas y entre comillas.

Hay que reconocer que el peje no se ha atrevido a expropiar como lo hicieron Fidel Castro en la Cuba de los años 60 y Hugo Chávez en la Venezuela del año 2000, pero ambos mandatarios (el cubano y el venezolano), dieron muestra que la administración de las empresas otrora productivas en manos de particulares, pasaron a ser improductivas en manos del Estado, tal y como Pemex está ahora.

Con esas experiencias, Iberdrola decide deshacerse de sus chatarras para venderlas a un muy buen precio al émulo de Moctezuma quien las presume como un logro. Al peje le dieron a escoger entre un billete de cien dólares y una moneda brillante de a peso y ¿adivinan cuál prefirió?

Por eso digo que no se vale que ese aprovechen de la ignorancia, la ignominia, la falta de capacidades, de talento y de talante del anciano vejete decrépito que vive en Palacio Nacional, él está impedido psíquicamente para establecer un proceso mental que le permita saber si ganará o perderá en una decisión de ese tipo.

Tanto Shell como Iberdrola -dijeran los tecos- “le jugaron su cabeza al peje”.

@leyvaguilar
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