Oaxaca de Juárez, Oax., a de 01 mayo de 2021. En el ejercicio de su derecho a la participación, niñas, niños y adolescentes de Oaxaca plantearon sus problemáticas y posibles soluciones para hacer frente a la nueva realidad que enfrentan, derivada de la pandemia por Covid-19, a través de la campaña 1,2,3 por ti.
Ante ello, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO) y las organizaciones World Vision México, SiKanda AC, a través de su programa Campos de Esperanza, realizaron el informe “Niñez y adolescencia en Oaxaca durante la pandemia por Covid-19”.
En el documento, disponible en: https://bit.ly/2Sfryq3, se plantean 28 propuestas, entre las que destacan “la realización de una evaluación del impacto de la estrategia de educación en línea en los niveles preescolar, primaria, secundaria y medio superior, a fin de conocer su eficacia en el aprendizaje, mismo que debe incluir la opinión de las y los estudiantes sobre sus propios aprendizajes e intereses, así como de madres y padres de familia o tutores, quienes han asumido un rol muy activo en el proceso educativo”.
En el marco del 30 de abril “Día de la niña y el niño”, y en el contexto de la pandemia, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca reiteró la importancia de escuchar a este sector de la población para construir políticas públicas.
En este sentido, el organismo resaltó que las propuestas contenidas en el Informe, emanadas de 174 planteamientos de niñas, niños y adolescentes del estado, tienen como fin atender en el corto, mediano y largo plazo, los problemas que los aquejan en el ejercicio de sus derechos.
Respecto al derecho a la salud, las niñas, niños y adolescentes plantearon: divulgar información sobre Covid 19 en formatos amigables y accesibles para niñas, niños y adolescentes, incluyendo las condiciones de personas con discapacidad, hablantes de lenguas maternas del estado y contextos socioculturales.
En relación al derecho al juego y esparcimiento, destacaron la implementación de campañas para reconocer como derecho de niñas, niños y adolescentes el esparcimiento y el juego, así como sus beneficios en el desarrollo cognitivo y psicoemocional.
En tanto que, en lo relativo al derecho a la familia, se propone promover modelos alternativos de crianza positiva, basados en el respeto de los derechos de niñas, niños y adolescentes, sin recurrir al castigo físico ni al maltrato emocional.
En lo que corresponde a la prevención y erradicación del trabajo infantil, destaca la instalación de la Comisión Interinstitucional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y la Protección de Adolescentes trabajadores en Edad permitida en el Estado de Oaxaca.
Además de elaborar e implementar el plan estatal para la prevención y erradicación del trabajo infantil, incluidas sus peores formas.
En lo que respecta a los derechos de niñas, niños y adolescentes con discapacidad, se planteó la formación de personal de instituciones educativas y de salud, en Lengua de Señas Mexicana para facilitar la comunicación directa. Además de reabrir los centros de rehabilitación.
Mientras que, para las poblaciones de niñas, niños y adolescentes indígenas, se propuso generar políticas y programas educativos con perspectiva de derechos y pertinencia cultural, compatibles con los contextos rurales e indígenas, que consideren la dotación de internet y acceso a los medios de comunicación, considerando su organización comunitaria interna para hacer llegar los contenidos educativos.