Por Félix García.
El mosaico de colores en la que se convirtieron los partidos políticos en este proceso electoral del año 2018, los ha llevó a perder identidad y lamentablemente sus propias ideologías, donde lo único que mostraron a los ciudadanos es que desde siempre, prevaleció en ellos intereses particulares y de grupo y jamás los de la mayoría.
Salvo el PRI que mantuvo su identidad a pesar de que sus propios críticos lo hundieron, el PAN y el PRD grupos totalmente contrarios en pensamientos y en actuaciones,perdieron en esta contienda del 2018, ahora no solo porque la gente ya no les cree, sino que olvidaron defender su identidad al prevalecer en ellos los intereses particulares por ello la derrota de algunos de sus candidatos, a quienes por cierto aun no les cae el veinte y no comprenden en que momento el agua y el aceite se juntaron solo para obtener un efecto contrario, la destrucción de su identidad como partido, uno de derecha y el otro de izquierda.
De los demás no merecen tanta importancia, porque los del PVEM, PT, Partido Nueva Alianza, Convergencia, Movimiento Ciudadano, Encuentro Social, sabemos claramente que se formaron como partidos apéndice solo para sacar raja económica de la situación electoral.
En este proceso electoral en la que los oaxaqueños eligen 153 presidentes municipales por el sistema de partidos políticos, diputados locales, diputados federales, senadores y un presidente de la República, se dará un fenómeno en la votación, muchos de los sufragios serán para los personajes contendientes y no para los partidos políticos, salvo sus excepciones.
De ahí que quienes se aplicaron en la contienda cosecharon producto de su trabajo, y a hora tendrán que demostrarlo como dignos representantes populares no solo por aquellos que votaron por ellos sino la ciudadanía en general.
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